Las
muestras recogidas de Ophthalmoplax en base en lutitas de la Formación Lodolitas de Aguacaliente dentro
de los afloramientos del margen oriental de la Cordillera Oriental de Colombia
representan el registro más antiguo del género en América. Su pequeño tamaño
puede estar relacionada con un evento anóxico durante los fines de Campania en
Colombia, y representan una nueva especie del género, nombrado O. andina
nuevas especies.
Feldmann
et al. (1999) informaron que Ophthalmoplax
spinosus Feldmann, Villamil y Kauffman, 1999 de la Formación Turoniana San
Rafael, cerca de Villa de Leyva, departamento de Boyacá; pero posteriormente,
Vega et al. (2007) asignado a este espécimen como Cenomanocarcinus
vanstraeleni Stenzel, 1945. Más tarde, Feldmann y Villamil (2002)
describieron Ophthalmoplax triambonatus
Feldmann y Villamil, 2002 de la Formación Puerto Romero, cerca de la ciudad del
mismo nombre, al oeste del departamento de Boyacá; el Maastrichtiense tardío ahora
se acepta para la Formación Puerto Romero, porque esta unidad se forma en la
parte superior de la secuencia del Cretácico de la cuenca del Magdalena Medio. Vega
et al. (2013) ilustra otro espécimen de Ophthalmoplax
(del posible edad Maastrichtiense tardío) del departamento de Tolima. Según
Vega et al. (2013), estos dos ejemplares, de tamaño relativamente grande,
corresponden a Ophthalmoplax brasiliana
(Maury, 1930), un taxón originalmente descrito se basado en muestras de gran
tamaño de la última formación de Maastrichtiense, al este de Brasil. Vega et
al. (2013) sugirieron que Ophthalmoplax
es monoespecífico en América (O. brasiliana), con un rango estratigráfico
en todo el Maastrichtiense y una distribución geográfica de Brasil a Carolina
del Norte, con O. stephensoni
Rathbun, 1935 y O. triambonatus como
sinónimos de O. brasiliana. O. minimos Ossó-Morales, Artal y Vega,
2010 (Ossó-Morales et al., 2010) a partir de finales de Campania de Marruecos
es la otra especie válida para el género.
Figura1: Mapa de localización |
Diagnóstico:
Pequeño
caparazón, más ancho que largo, subcuadrada; rostrum bifid; espinas orbital
agudas y cortas. Superficies dorsal del caparazón principalmente definido por cantos
transversales y ranuras afiladas, ranuras profundas que separan esta zona de la
región mesobranchial; región mesobranchial con tubérculos finas en crestas,
conectados a largo de la espina lateral.
Descripción:
Caparazón
pequeño, más ancho que largo, subcuadrado, ancho máximo en la región mesobranchial;
superficie dorsal convexa; rostrum bifid; margen orbitofrontal con una profunda
fisura que separa rostrum bifid de la espina orbital; espina orbital afilada y corta;
margen anterolateral 60% de la longitud máxima del caparazón, ligeramente cóncavo;
borde posterolateral convexo, más largo que el margen anterolateral; margen
posterior convexo, ligeramente más corto que el margen orbitofrontal. La
superficie del caparazón dorsal esta principalmente definido por los cantos
transversales y surcos afilados; región mesogastrio subovate, con arista
transversal que con tubérculos finos en la cresta, delimitado desde la región
epibranchial por una profunda ranura longitudinal; la región urogastric forma
una pequeña depresión profunda, estrecha y lisa, de forma subrectangular, delimitada
por lóbulos bien definidos, separados por surcos profundos; región cardiaca subtrapezoidal,
afilada, la cresta transversal con tubérculos finos; región intestinal indiferenciada;
región hepática con cresta estrecha, conectada lateralmente con la espina
anterolateral que es afilada y larga; región
epibranchial ligeramente convexa con lóbulos, delimitadas por ranuras y los
lóbulos de las regiones adyacentes; región mesobranchial con tubérculos en las
crestas, conectados a la larga, afilada espina lateral; región metabranchial
indiferenciada; sin región ventral ni apéndices se conservan.
Etimología:
El nombre de la nueva especie se relaciona con la región andina de Colombia.
Material:
Dos pequeños caparazones, holotipo ONU-DGCR- 021; paratipo ONU-DG-CR-022.
Imagen 2: Morfología del caparazón dorsal, holotipo UN-DG-CR-021. Escala = 1cm |
Imagen 3:Morfología del caparazón dorsal, paratipo UN-DG-CR-022. Escala = 1cm |
Discusión:
Maury (1930)
informó que Ophthalmoplax brasiliana
del Maastrichtiense Superior, Brasil. Beurlen (1958), basado en las
diferencias morfológicas, sugirió la concordancia de O. brasiliana con O.
stephensoni Rathbun, 1935. Feldmann y Villamil (2002) describen O. triambonatus de Colombia; sin
embargo, el único espécimen es muy similar a O. brasiliana y ambos son del Maastrichtiense tardío. Rathbun
(1935) y Schweitzer et al. (2007) en la descripción de ejemplares de O. stephensoni, presenta características
idénticas a las observadas en los ejemplares de O. brasiliana. Aguilera et al. (2010) describe O. triambonatus del Maastrichtiense tardío de Venezuela pero de
nuevo se observa que las especies tienen características idénticas a las
observadas en las muestras de O. brasiliana.
Finalmente, Vega et al. (2013) describieron Ophthalmol
sp. del Maastrichtiense de Tolima y que también tiene características
idénticas a las observadas en las muestras de O. brasiliana. Según Vega et al. (2013), O. stephensoni es sinónimo de O.
brasiliana (Vega et al., 2013). Por otra parte, Mascaranada difuntaensis descrito por Vega y Feldmann (1991) en el Maastrichtiense
temprano de Potrerillos, NE México, corresponde a O. brasiliana. Ophthalmoplax
spinousus de la Formación de San Rafael (Turoniano), descrito por Feldmann
et al. (1999) se volvió a definir como Cenomanocarcinus
vanstraeleni por Vega et al. (2007).
Ophthalmoplax ha sido documentado desde el
norte de África, donde el género está presente en rocas del Cretácico superior
de la región noreste de Moyenne Mouluya Marruecos. Aquí fue descrito como O. minimos y representa el primer
registro para Opthalmoplax en el
Reino Tetis. 87Sr / 86Sr datos isotópicos obtenidos a partir de la cutícula
bien conservada de O. minimos sugiere
una edad absoluta de 76 Ma. Vega et al. (2013) propusieron que Ophthalmoplax fue representado por una
única especie en América (O. brasiliana)
desde el temprano al tardío Maastrichtiense, que se distribuye desde Brasil a
Carolina del Norte, invalidando así O.
stephensoni y O. triambonatus
(Img. 5-6). Hasta la fecha (en las Américas), el registro más antiguo de Ophthalmoplax correspondió a la Maastrichtiense
temprano (O. brasiliana). El nuevo Ophthalmoplax sp de Lodolitas de Aguacaliente de la Cordillera
Oriental de Colombia, aquí se considera que es mayor y puede representar el
registro más antiguo para el género en América.
La nueva especie de
Ophthalmoplax es similar a O. brasiliana, pero es diferente para la
presencia de espinas laterales extremadamente largas y el tamaño (incluso más
pequeño que O. minimus).
El pequeño tamaño
puede estar relacionado con las fluctuaciones de temperatura. Sobre la base de
la abundancia nanofósil calcárea, se sabe que entre el Turoniano al Maastrichtiense,
hubo un enfriamiento continuo del agua de mar, precedido por uno de los
períodos más cálidos del Fanerozoico. En este escenario, las temperaturas
globales disminuyeron entre 4 - 6 ° C. Según Keller (2008), las bajas
temperaturas aumentan la diversidad en relación con el aumento de los ciclos de
nutrientes y la estratificación de las masas de agua (Img. 7).
Las evidencias
estratigráficas y bioestratigráficas presentes en la Formación Lodolitas de
Aguacaliente sugieren que la unidad se depositó durante una fase alta relativa
del nivel del mar (Guerrero y Sarmiento, 1996; Tchegliakova et al, 1997). En
concreto, el horizonte que contiene
Ophthalmoplax andina n. sp. está situado hacia el final de un período
transgresivo, en el Campaniano tardío, que puede estar asociado con una oxigenación
y anoxia generalizada en toda la cuenca colombiana cretácica, de acuerdo a las
variaciones observadas entre los foraminíferos bentónicos del Cretácico superior
(Img . 8). Cuando las poblaciones se agruparon en las preferencias de la
infauna y epifauna, se encontró que los niveles de oxígeno disponibles en el
fondo del mar podrían haber controlado su distribución. La evidencia sugiere
que las asociaciones dominadas por el morfogrupo epidaunal indican niveles
bajos de oxígeno (Tchegliakova et al., 1997), como se observa también en el O. andina n. sp. El último escenario
prevaleció durante el momento de máxima transgresión de la parte media-alta de
Lodolitas de Aguacaliente, que es una unidad correlativa con la Formación
Plaeners (sector central de la cuenca del Cretácico Colombia), donde además de
la anoxia, la alta acidez (Cruz et al., 2011), basado en la caracterización
química de las pruebas de foraminíferos.
Imagen 5:A) Ophthalmoplax andina n. sp., holotipo ONU-DG-CR-021, Colombia. B) O. minimos, ~ 76 Ma, Marruecos |
Conclusión:
Ophthalmoplax andina n. sp. De las Lodolitas de
Aguacaliente de Colombia representa el género estratigráficamente más antiguo en
América, así como el más pequeño Ophthalmoplax
informó a fecha. La reducción de tamaño puede estar relacionada con las
condiciones anóxicas que hubo durante un período de sumersión. Se sugiere que
el pequeño tamaño puede ser debido al resultado de las presiones adaptativas
ambientales, relacionados con condiciones de anoxia.
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