lunes, 26 de febrero de 2018

¿Eres miope? Pues échale la culpa a la evolución.




Resultado de imagen de Daniel Lieberman      Daniel Lieberman, un reconocido paleoantropólogo y profesor de Biología Evolutiva en la Universidad de Harvard, es conocido por sus reflexiones sobre nuestro desarrollo como especie: desde las adaptaciones locomotoras de los primeros homininos, su dieta y sus modos de vida hasta los importantísimos cambios culturales y sociales asociados, entre otros, a la invención de la agricultura o la Revolución Industrial. Lieberman, representando a Charles Darwin en el siglo XXI, nos habla de la importancia de la selección natural y de los procesos adaptativos que han configurado la biología de nuestros cuerpos.
      Uno de sus argumentos clave es que la salud de nuestras sociedades se resiente cada vez más por culpa de la llamada hipótesis desadaptativa. Este es un concepto esencial en el emergente campo de la medicina evolutiva, disciplina que aplica las ideas desarrolladas por la biología evolutiva. Es innegable que crecen las enfermedades como la diabetes de tipo 2, la obesidad, la ansiedad y la depresión; y lo mismo pasa con el insomnio, el dolor de espalda, las alergias o la miopía. Todas ellas son dolencias de una ínfima relevancia, casi desconocidas, en las sociedades de cazadores-recolectores que aún subsisten en nuestro tiempo. En el caso concreto de la miopía, afecta al 47% (casi la mitad) de los jóvenes de entre 25 y 29 años en Europa. 
Resultado de imagen de miopía

      En el caso de la miopía, no obstante, dado que los genes de la gente no han podido cambiar en tan poco tiempo como son estos últimos siglos,  la reciente epidemia de miopía debe resultar por tanto de factores ambientales. Dentro de estos factores, podemos destacar la vida cómoda y moderna de interiores y las largas horas de lectura. Esta epidemia visual del siglo XXI (se estima que en 2020 un tercio de la población mundial será miope) se debe sobre todo al hábito de mantener la vista fija durante largos periodos en imágenes cercanas, como las palabras escritas en una página o en una pantalla. 

      Sin embargo, existe una sustentación paleontológica para la existencia de la miopía. Emiliano Bruner, José Manuel de la Cuétara, Michael Masters, Hideki Amano y Naomichi Ogihara presentaron dos estudios de casos donde la información paleontológica podía agregar enfoques complementarios para la comprensión de los procesos detrás del origen y etiología de dos patologías generalizadas: la miopía y la enfermedad de Alzheimer. 
Resultado de imagen de cráneo homo neandertal
      En cuanto al tema que nos ocupa, la miopía, los seres humanos hemos experimentado una historia morfológica única entre los mamíferos, con millones de años de expansión cerebral y reducción del prognatismo facial que han provocado que los ojos y las órbitas descansen directamente debajo de la corteza frontal. Ciertas formas de reducción de la agudeza visual pueden estar relacionadas con la competencia entre los tejidos blandos de los ojos y los duros de los huesos de las órbitas.En los neandertales, la encefalización de los homínidos se ha traducido en una serie de modificaciones en la bóveda craneal, base craneal, y cara. Una posición más anterior y el desarrollo lateral de la corteza prefrontal sobre los ojos, la expansión de los lóbulos temporales y la reducción del prognatismo facial, pueden perjudicar la agudeza visual, ya que limitan el desarrollo orbital y ocular. Se manifiesta un marcado incremento en las proporciones generales, con áreas prefrontales relativamente más anchas en la tapa de Broca, en comparación con otras especies humanas. Es probable que la redistribución lateral de esta masa cortical esté relacionada con las restricciones entre cerebro y estructuras craneales, y, en particular, restricciones impuestas por la arquitectura facial. Las restricciones sobre las órbitas y los tejidos blandos de la vista, asociada con la expansión y reubicación anterior de los lóbulos frontal y temporal, podría haber sido más severa en los humanos modernos, y en los Neandertales más que en los homínidos de pequeño cerebro, como resultado de la relación espacial única entre estos rasgos anatómicos en estos grupos.

      Estos cambios evolutivos, además de una disminución comprobada en el volumen orbital desde el Neolítico en China, son las tendencias más importantes a tener en cuenta en la investigación de la mayor frecuencia y gravedad de ciertas formas de reducción de la agudeza visual como la miopía y el astigmatismo.
  
      Para aclarar un poco todo el tema paleoantropológico, os dejo un vídeo que lo explica bastante bien aquí

      Bueno pues hasta aquí el post, espero que os guste y lo encontréis interesante. Los próximos posts estarán dedicados también a temas relacionados con la biología evolutiva, como este.

      REFERENCIAS:
      
      http://paleoantropologiahoy.blogspot.com.es/2014/05/origen-evolutivo-de-miopia-astigmatismo.html

      https://www.muyinteresante.es/revista-muy/noticias-muy/articulo/eres-miope-la-culpa-es-de-la-evolucion-411460704529

      http://endmyopia.org/story-of-the-human-body-harvard-evolutionary-biologist-daniel-lieberman-discusses-myopia/


2 comentarios:

Manuel Hernández Fernández dijo...

¿Y tú quién eres?

Manuel Hernández Fernández dijo...

Tienes que identificar tu perfil con nombre y apellidos. Como divulgador en ciernes, debes abandonar el anonimato.

Con respecto a la entrada, lo único que has hecho ha sido resumir unas noticias periodísticas, sin hacer referencia aparente a ningún artículo científico de 2018, que es la tarea encomendada a los autores de este blog.