viernes, 23 de mayo de 2014

Seres Prehistóricos: El último de su especie

Una fundación creada por la productora de la película "Jurasic Park" financia el hallazgo en Argentina del primer brontosaurio que se encuentra en Sudamérica y el último registrado de esa especie.

- Poseía una cola más fuerte y precisa con la que combatir a sus depredadores - según los estudios realizados.


Leinkupal laticauda defendiéndose de
depredadores contemporáneos a su época.

Las vértebras halladas en la provincia patagónica de Neuquén corresponden a un tipo de dinosaurio que se pensaba que únicamente había vivido en Norteamérica, Europa y África. Ha sido bautizado con el nombre de Leinkupal laticauda.
“En realidad, creemos que los diplodócidos ya estaban presentes desde el Jurásico en Sudamérica, pero simplemente no teníamos evidencias de ellos”, explica a Materia el investigador argentino Pablo Gallina, principal autor del hallazgo que publica la Plos One.  
Los restos encontrados son ocho vértebras que fueron excavadas en la formación Baja Colorada, entre los pueblos de Picún, Leufú y Piedra del Águila. 
Apesteguía, otro de los investigadores, señaló que los restos del animal, de unos 140 millones de años de antigüedad, son además el "único registro" que se tiene de esa especie en el periodo Cretácico en Sudamérica. Las ocho vértebras halladas pertenecen "al cuello, la zona de la espalda y la cola", señaló.

INTRODUCCIÓN

Los diplodócidos son con diferencia los dinosaurios saurópodos más emblemáticos.  No eran reconocidos por haber existido en el Cretácico, pero aquí se ha descubierto esta nueva especie, Leikupal laticauda gen. et sp. nov., perteneciente al comienzo del Cretácico tardío y hallado en Neuquén, provincia de Argentina. Éste taxón se diferencia de otros saurópodos por la presencia de un caudal anterior transverso extremadamente desarrollado con expansiones lateroventrales reforzadas por una dorsal robusta y barras ventrales, una muy robusta lámina centroprezygapofisis sellada en la vertebra caudal anterior y un par de fosas neumáticas en el postzygapófisis en la vértebra caudal más anterior.
El nuevo descubrimiento representa el primer registro de un diplodócido de Sur América y el registro más reciente estratigráficamente de este clado.


Neuquén, Argentina.


  • Holotipo:  MMCH-Pv 63-1
  • Paratipo: 2 vértebras cervicales anteriores (MMCH-Pv 63-2/3), una vértebra cervical posterior (MMCH-Pv 63-4), una vértebra dorsal posterior (MMCH-Pv 63-5),una vértebra caudal anterior (MMCH-Pv 63-6) y 2 vertebras caudales medias  (MMCH-Pv 63-7/8).

DESCRIPCIÓN Y COMPARACIONES

Vértebras cervicales y dorsales
Aunque incompletas, tres vértebras cervicales y una vértebra dorsal se conservan (Figura 1).  Todos ellos carecen parcial o totalmente una de sus caras laterales. Proporcionalmente, las vértebras se asemejan a la sexta, octava y undécima vértebras cervicales del Apatosaurus y la segunda vértebra dorsal del Diplodocus. La vértebra más anterior (C6) es casi completa, a excepción de la punta de la espina neural y la cara lateral derecha parcialmente dañado.
Las otros tres vértebras (C8, C11 y D2) están sólo en parte conservados.
Vértebras cervicales y dorsales

La longitud del Centrum: varía de dos veces a tres veces la altura del cótilo en los tres primeros elementos, disminuyendo a un año y medio en el dorsal anterior. En toda la zona central se comprimen ligeramente en la dirección media lateral, y muestran bien desarrollado fosas neumática lateral en sus caras laterales; Sin embargo, la mala conservación oculta la complejidad de la neumatización.
Los arcos neurales son más altos que la zona central en todos los elementos conservados, aunque esta proporción aumenta a lo largo de la secuencia. En C6, el canal neural es notablemente alto y se asemeja a un arco románico con un borde dorsal semicircular. En cambio, los otros muestran vértebras cervicales canales neuronales circulares, también presentes en Diplodocus.

Vértebra caudal
Dos vértebras caudales anteriores (Figura 2) y dos medias (figura 3) se conservan. Basado en el gran tamaño del Centrum y la extensión dorsoventral de los procesos transversales, el elemento más anterior puede corresponder a la primera o la segunda vértebra caudal (CA1-2). El siguiente elemento se asigna como el séptimo caudal (CA7), que conserva los procesos transversales alargados lateralmente con los extremos apuntando ventralmente como se observa en otros diplodócidos [3], [28], [11]. La mitad de caudal anterior, asignada como la duodécima (Ca12) es incompleta, comprimida lateralmente, pero conserva las láminas diapofisiales y fosas bien definidas. Por el contrario, la mitad de caudal posterior (asignado como CA20) es casi completa, tanto con el  Centrum como el arco neural bien conservado, exceptuado el prezigapófisis derecha, lo que falta.
Vértebra caudal
Las caras ventrales de los elementos anteriores son lisas, sin quillas longitudinales. En CA20 una amplia concavidad longitudinal, ventral se desarrolla como en otros diplodócidos, como Supersaurus, Tornieria, Diplodocus y Barosaurus. Las fosas neumáticas laterales son ovoidales y están bien desarrolladas, persisten en CA20. En la actualidad, la extensión de las fosas neumáticas laterales en vértebras caudales medias están potencialmente restringidas a diplodócidos.




ANÁLISIS FILOGENÉTICOS

Las matrices de datos utilizadas se basan en las filogenias de neosaurópodos publicadas anteriormente que se centraron en las relaciones Diplodocoidea y Diplodocidae, con la adición de este nuevo taxón. Dos caracteres vertebrales se añadieron a ambos conjuntos de datos, lo que resulta en una matriz de datos de 191 caracteres y 27 taxones, y 236 caracteres y 14 taxones, respectivamente. Los datos fueron analizados utilizando TNT v.1.1, con una búsqueda heurística de 1.000 réplicas de árboles Wagner seguido de TBR (árbol de bisección de reconexión) rama intercambio. 
El apoyo y remuestreo de Bremer fue usado para evaluar la robustez de los nodos de los árboles más parsimoniosos en ambos análisis.

Dos análisis diferentes se llevaron a cabo con el fin de establecer la posición filogenética de Leinkupal laticauda entre diplodocoideos. En el primer análisis se incluyó Diplodocoidea. El resultado fueron 156 árboles igualmente parsimoniosos de 344 pasos 
(IC = 0,605, RI = 0,770). 

Un árbol de consenso estricto recupera Leinkupal laticauda profundamente anidado dentro Diplodocidae, como la taxonomía hermana de Tornieria africanaAmerican barosaurus  y Diplodocus.


Clados

CONCLUSIÓN

Leinkupal laticauda, representado por el material fragmentario de los estratos del Cretácico Inferior de Argentina, sugiere que la supuesta extinción de Diplodocidae en el límite Jurásico/Cretácico no se produjo a nivel mundial, el clado sobrevivió en América del Sur por lo menos durante una parte del Cretácico Inferior . Esto fue, al lado de los otros dos grandes clados diplodocoides, una asociación extremadamente rica no registrada antes. 
El análisis de la fauna de Baja Colorada muestra que los diplodocoideos fueron diversos y abundantes en el Cretácico Inferior de la Patagonia. 

El análisis filogenético sugiere una relación más estrecha de Leinkupal a Tornieria africano, mostrando una distribución generalizada y temprana de diplodócidos en América del Sur o, alternativamente, una colonización de América del Sur desde África por el límite Jurásico / Cretácico. La presencia de Leinkupal como saurópodo diplodócido en esta época, empuja el origen de Diplodocoidea a principios del Jurásico Medio o potencialmente incluso antes.

Diplodócidos son los dinosaurios saurópodos más emblemáticos. El reconocimiento de los miembros de este clado en Argentina, aumenta la lista de los clados de saurópodos conocidos de este país, lo que representa un riquísimo retrato de la evolución de saurópodos.

ETIMOLOGÍA
En el idioma mapuche que hablan los indígenas en la Patagonia la primera palabra, Leinkupal, significa "familia que desaparece", ya que el hallazgo corresponde al último descubrimiento mundial conocido de un dinosaurio de la familia de los diplodócidos; y laticauda significa en latín "cola ancha" (contaba con una gran precisión a la hora de usar su cola como un látigo).

(Noticia publicada el 14 de Mayo de 2014)
Revista Plos One:  http://www.plosone.org/article/info%3Adoi%2F10.1371%2Fjournal.pone.0097128

REFERENCIAS


  • Marsh OC (1877) Notice of some new dinosaurian reptiles from the Jurassic Formation. American Journal of Science (Series 3) 14: 514–516.

  • Marsh OC (1878) Principal characters of American Jurassic dinosaurs, Part I. American Journal of Science (Series 3). 16: 411–416.

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