lunes, 8 de junio de 2015

¡Menudos perezosos!

INTRODUCCIÓN:

Os estaréis preguntando por qué he elegido este animal mamífero placentario si no es un carnívoro. Bien, pues para relacionarlo con mis anteriores entradas de blog podemos destacar que este animal está asociado nada más y nada menos que a una biozona de América del Sur perteneciente al Pleistoceno. Esta biozona se denomina Bonarense y como veremos en mi último artículo esta biozona es esencial, junto con las demás biozonas, para explicar la escala cronoestratigráfica, geocronológica y bioestratigráfica del Cuaternario en América del Sur y así poder describir a los distintos carnívoros en estas biozonas.


Muchos no sabréis que clase de especie es Megatherium americanum pero para que os hagáis una idea podemos decir que se cree que uno de sus parientes más cercano vivo es el perezoso. Y claro, ¿quién no conoce al gracioso perezoso de Ice Age?

Figura 1: Sid, el perezoso de Ice Age.

Ahora que ya todos sabemos a que clase de animal nos referimos podemos centrarnos en este mamífero y conocer más aspectos sobre su forma de vida, su extinción y sobre la edad a la que perteneció.

En realidad la apariencia de Megatherium americanum no era exactamente igual que los perezosos y desde luego era mucho más grande que el famoso Sid. Esta especie, cuando el animal era adulto, tenía unos seis metros desde la cabeza hasta la cola y media casi dos metros desde el suelo hasta el lomo. En la siguiente imagen (Figura 2) podemos hacernos una idea del gran tamaño que tenían estos animales con respecto a nosotros.

Figura 2: comparación entre Megatherium americanum y nosotros.

Restos fósiles de este animal se encontraron en la provincia de Mendoza en Argentina, donde el registro de megamamíferos no ha sido muy amplio. En concreto los restos óseos se encontraron en la localidad de Manquil-Malal y los objetivos que siguieron en el artículo en el cual he basado mi entrada (El registro de Megatherium (Xenarthra, Tardigrada) en Mendoza (Argentina): aspectos taxonómicos, cronológicos y paleoecológicos escrito por Angel Praderio, Adolfo Gil y Analía M. Forasiepi) son principalmente dar a conocer estos restos de una especie de perezoso terrestre y realizar inferencias paleobiológicas y paleoecológicas, sobre el estudio de isotopos estables de 13C, 15N  y 18O tanto en colágeno como en apatita ósea e informar sobre la fecha radiocarbónica obtenida.

MATERIALES Y MÉTODOS:

Estratigrafía:

Los restos fósiles se encontraron tras remover sedimentos deposicionales por un alud pluvial. El área de estudio se encuentra en el pedemonte de la Cordillera Principal. Los afloramientos en los que se encontraron los restos se presentan como depósitos aislados quedando expuestos a la erosión fluvial. Los depósitos cuaternarios portadores del material de Megatherium se apoyan discordantemente sobre la Fm. Vaca Muerta (Figura3).

Por las características litológicas, se puede decir que estos depósitos corresponden a una planicie aluvial con canales fluviales cuya energía disminuye gradualmente hacia el techo de la secuencia. Si bien el material de Megatherium se halló fuera de su contexto estratigráfico original, por las similitudes entre el sedimento adherido al fósil y las características litológicas del perfil es posible que el mismo provenga de los niveles limos arenosos del sector superior de la secuencia (Figura 3).


Análisis isotópico y radiocarbónico:

Se analizaron los resultados de los isótopos estables de 13C y 15N basados en el procesamiento de la fracción orgánica (colágeno) y los valores 13C y 18O obtenidos de la fracción inorgánica (apatita) del material de Megatherium americanum. 

RESULTADOS Y DISCUSIÓN:

Paleontología sistemática:

Superorder Xenarthra Cope, 1889
Order Tardigrada Latham y Davies en Forster, 1795
Familia Megatheriidae Gray, 1821
Género Megatherium Cuvier, 1796
Megatherium cf. M. americanum
Cuvier, 1796

Material referido:

Fragmento de dentario derecho con parte de la dentición, dos vértebras sacras, fragmentos del ilion y de la sínfisis púbica, todo perteneciente al mismo individuo (Figura 4).


Edad radiocarbónica:

12 300 ± 120 años radiocarbónicos antes del presente.

Asignacion a Megatherium americanum:

El género Megatherium incluye numerosas especies distribuidas a América del Sur entre las cuales M. americanum es la única reconocida para Argentina y la de mayor tamaño, con una masa estimada entre cuatro y seis toneladas. La robustez del dentario y el tamaño de los molariformes inferiores del ejemplar de Manqui-Malal son consistentes con M. americanum. Sin embargo, dado el carácter fragmentario del material estudiado los expertos prefieren mantener una taxonomía abierta.

Análisis de los isótopos estable:

Diversos estudios han demostrado la sensibilidad de los isótopos estables para inferir aspectos de la dieta y preferencias del hábitat de la fauna extinta.

El 13C se basa en la propiedad de la discriminación isotópica diferencial del C (13C/12C) en los vegetales con distintos mecanismos fotosintéticos. Se asume que un individuo con una dieta basada en recursos C3 (mayormente arbustos y pastos de altitud) tendrá valores aproximados de 13C de -21.5 en el colágeno, mientras que aquel con una dieta basada en recursos C4 (mayormente pastos de zonas áridas y hierbas) tendrá valores del orden de -7.5%. En particular con la apatita, la dieta basada exclusivamente en C3 tendrá valores del orden de -15%, mientras que en la dieta basada exclusivamente en C4 los valores rondarán en 1%. El análisis del 13C del colágeno y de la apatita arrojó valores de -16.4% y -8.8%, respectivamente (Tabla 1). Dichos valores sugieren un importante componente mixto en la dieta de los recursos de fotosíntesis C3 y C4. La diferencia entre el 13C del colágeno y de la apatita en el espécimen es coincidente con el valor esperado para herbívoros.

Los análisis de isótopos estables en 15N generalmente han sido utilizados para discriminar los niveles tróficos dado que existe un incremento de 3% de acuerdo a cada nivel, aunque también se ha fundamentado que este isótopo es sensible a las variables climáticas. El 15N tubo valores de 7.6%.

Los valores de 18O varían según las condiciones climáticas y la fuente de
agua que el individuo utiliza. El isótopo estable de oxígeno en la fracción carbonato de la hidroxiapatita del hueso y del esmalte de los dientes reflejan la composición isotópica del agua corporal a 37° C. El agua corporal está influenciada por la composición isotópica del agua bebida y, en menor grado, por la del oxígeno en aire y de las fuentes de alimento. Esto hace del 18O una medida útil para predecir las variaciones ambientales y climáticas. El 18O obtenido sobre la apatita del perezoso arrojó valores de -10.3%, lo que resulta esperable para un individuo que en promedio ingirió agua con valores estimados en -14.5%.


Aspectos paleoecológicos, paleoambientales y extinción:

Los resultados del análisis de isótopos muestran un patrón concordante con los cambios propuestos para el ecosistema pleistocénico del sur de Mendoza. Este patrón implica dietas casi exclusivamente compuestas por plantas C3 para los herbívoros registrados entre los 20 000 y 14 000 años, mientras que los registrados posteriormente reflejarían una dieta mixta con distintas frecuencias de plantas C4. Estos datos sugieren cierta amplitud en la dieta de estos perezosos. La información isotópica sugiere una importante variabilidad en la dieta de los perezosos con especímenes cuya dieta estaba basada en plantas C3 y otros en la cual el componente C4 era alto. 

Los valores de isótopos de los perezosos aquí resumidos y analizados son concordantes con la variabilidad adaptativa sugerida a partir de los análisis morfológicos y muestran además un incremento general en el consumo de las plantas C4 con posterioridad a los 14 000 años   (Figura 5).


Megatherium americanum probablemente se alimentaba seleccionando ciertas plantas (arbustos) o partes de plantas (hojas, ramas y frutos) o incluso, de acuerdo a la morfología de la superficie oclusal de los molariformes, podrían haber cortado alimentos blandos pero resistentes incluyendo carne, dejando abierta la posibilidad de una dieta omnívora.

En el sur de Mendoza, entre los 14 000 y 12 000 años se habría producido un cambio en la vegetación, con el establecimiento geográfico del Monte y el desplazamiento del desierto patagónico. Esto implicaría un cambio en el patrón de las precipitaciones, de una tendencia invernal a un patrón veraniego a partir de unos 12 000 años. Asimismo, se ha establecido un momento de mayor aridez entre 20 000 y 14 000 años. Estos cambios climáticos habrían favorecido el desarrollo de extensos campos de dunas y una cubierta vegetal muy escasa. La falta de un verano húmedo claramente definido habría sido un factor de impacto en la vegetación del Monte subtropical. En síntesis, concordante con estos cambios ambientales, los herbívoros,  muestran un cambio en sus dietas en correlación con el incremento de plantas C4. En ese contexto, los cambios del ecosistema no estarían explicando regionalmente la extinción de estos taxones.

Por su parte, los registros arqueológicos en el sur de Mendoza y áreas vecinas señalan que las evidencias más antiguas de ocupación humana datan de alrededor de los 11 000 años. Los restos del Megatherium americanum de Manqui-Malal aquí presentados, datados en 12 300 años son previos a las primeras evidencias de colonización humana del área. Aunque no hay registro de explotación de estos mamíferos como recurso, esta coincidencia abre la necesidad de considerar el agente humano entre los factores causales de la extinción. Este modelo ha sido propuesto para explicar la extinción de la megafauna en América del Sur.

CONCLUSIÓN:

Aun considerando su carácter fragmentario, Megatherium americanum es hasta ahora uno de los restos de perezosos mejor preservados para la provincia. Además, los escasos registros carecen mayormente de un marco estratigráfico adecuado lo cual restringe la posibilidad de interpretar el contexto paleobiológico. De acuerdo a la información disponible, los xenartros representan el grupo taxonómico de mayor distribución en la región estando presente en gran parte de las localidades portadoras de restos fósiles del Cuaternario de la provincia.

Los aspectos más importantes que se han conseguido sacar de este estudio realizado con isótopos estables son el conocimiento sobre la dieta de estos perezosos ya que se ha observado un cambio en la dieta con un aumento de los alimentos de pastos y de hierbas, este aumento con respecto a otros especímenes del mismo taxón es significativo, e incluso se ha llegado a la conclusión de que realmente desconocemos si Megatherium americanum era absolutamente herbívoro o podría añadir a su dieta la carne, esto seguirá siendo todo un misterio de momento.

Además como siempre se ha propuesto para la megafauna extinta del continente americano, la hipótesis que parece más correcta es que los humanos tuviésemos algo que ver en la extinción de estos animales, que por supuesto databan de edades anteriores a que llegaran los humanos colonizadores a estas regiones estudiadas. Podemos hacernos a la idea de que después de tantos casos en los que especies se han extinguido debido a esta hipótesis, posiblemente sí que hayamos sido los culpables de la extinción de animales mamíferos extraordinarios y de gran tamaño, todo a causa la caza humana que tuvo lugar en el Pleistoceno.

PARA AMPLIAR:

El primer esqueleto de Megatherium americanum fue descubierto en 1798 en bastante buenas condiciones.


REFERENCIAS:

  • M. SUSANA BARGO - The ground sloth Megatherium americanum: Skull shape, bite forces, and diet.

  • ANGEL PRADERIO, ADOLFO GIL y ANALÍA M. FORASIEPI - registro de Megatherium (Xenarthra, Tardigrada) en Mendoza (Argentina): aspectos taxonómicos, cronológicos y paleoecológicos.

1 comentario:

Manuel Hernández Fernández dijo...

Los nombres científicos se escriben en cursiva también en las referencias...